
Y al parecer el deseo más intenso y hasta sexual de un segmento exiguo de la población colombiana está a punto de hacerse realidad: en un informe que hizo conocer la Revista Semana en la mañana de hoy, se confirma que la Fiscalía General de la Nación tiene lista una orden de captura en contra del Ex Presidente de Colombia Álvaro Uribe Velez, orden que se haría efectiva en los próximos días.
El informe señala que al menos tres delitos fueron tenidos en cuenta por el ente de control para expedir la orden que privaría de su libertad al ex presidente. El primer delito que se le imputa y el más grave tiene que ver con las famosas «Chuzadas» en el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), que según la fiscalía fueron supervisadas directamente por Uribe, quien se encargó en persona de distraer a reconocidos personajes de la izquierda colombiana, para que miembros del DAS le metieran micrófonos microscópicos en sus teléfonos celulares. Se habla incluso de que Uribe instaló el mismo una cámara en el baño de Piedad Córdoba, pero que los agentes del DAS tuvieron que retirarla a las volandas, luego de que uno de ellos sufriera una embolia luego de ver las horripilantes imágenes.
El segundo delito que se le imputa a Uribe tiene que ver con los llamados «Falsos Positivos». La Fiscalía argumenta que fue el mismo Uribe, que nunca tenía nada que hacer, el que se encargó de matar personalmente a miles de personas, sólo para mostrar resultados y que si no lo habían podido señalar hasta el momento, era porque no había cometido los asesinatos con armas de fuego, sino con una motosierra en la mano y riendo a carcajadas, al mejor estilo de Hollywood. En esto, por supuesto, jamás tuvo que ver nuestro actual presidente Juan Manuel Santos, que es sólo bondad y pureza y no sabía nada de el asunto, a pesar de ser el Ministro de Defensa.
El tercer delito que aparece en el informe tiene que ver con los viles hechos en los que murió Raúl Reyes en un campamento en el Ecuador. La Fiscalía acusa a Uribe de asesinar un heraldo del Señor de los Cielos, cuya misión en la tierra era apenas la de instruir a un montón de gente muy, pero muy inteligente en las delicadas artes del asesinato a sangre fría, el secuestro con fines políticos, la reclusión de menores, el terrorismo, entre otras no menos importantes, violando de paso el espacio aéreo de ese país que tanto ha colaborado con Colombia en la lucha contra la delincuencia, con acciones tan eficaces como exigir la vacuna contra la Fiebre Amarilla cuando toca pasar la frontera. También se le acusa de haberle quitado a estos valerosos guerreros de las FARC, que son los verdaderos adalides del pueblo, sus valiosos tesoros, por lo que se agrega robo a la larga lista de delitos. Sólo a un monstruo como Uribe se le ocurre robarle a las FARC los secuestrados de la Operación Jaque, que eran de la exclusiva propiedad de esta guerrilla por más de una década y sobre todo su joya de la corona: la ex candidata a la Presidencia de la República, la ahora no muy bien vista Ingrid Betancourt, luego que a la doña se le ocurriera demandar al pueblo colombiano por la «simbólica» suma de 7 millones de dólares.
En fin, para leer el informe completo, emitido por la Revista Semana haga click en este enlace.