Manual del Perfecto Chirrete

Si usted vive en la inmarcesible y mil veces saqueada República de Colombia, seguramente ya habrá leído o escuchado la palabra chirrete, si es que esta no hace parte ya de su extenso y amplísimo vocabulario.

Sin embargo, en vista de que muchos nacionales y extranjeros tienen aún dudas del verdadero significado de la palabra chirrete resulta necesaria una definición mucho más estoica que aclare cualquier duda al respecto.

Y es por esta razón que me he dado a la tarea de exponer de manera concisa, pero clara, las particularidades propias del perfecto chirrete, un manual que le permita no sólo identificar quién entra en la no tan afamada categoría, sino también examinar en que nivel de chirretismo anda usted, porque de lo que no cabe duda es que, sin importar sexo, raza, origen nacional o familiar, lengua, religión, opinión política o filosófica, cualquiera es susceptible a sufrir tan penoso mal.

1 El Corte de Pelo

Lo primero que usted debe hacer para convertirse en el perfecto chirrete es ponerle atención a su cabeza. Deje de usar champú, acondicionador o cualquier tipo de producto que pueda embellecer su cabello. El único producto que necesitará jamás es el gel, y de ser posible trate de encontrar el llamado Moco de Gorila, que seguro hará que su cabello quede hecho toda una plasta de mierda belleza. Ahora, si sus recursos no son tan altos como para comprar algunos de los mencionados productos, siempre podrá hacer uso del colbón de tienda en cantidades generosas, o en los casos más extremos, del bóxer común, ese de pegar zapatos.

Dichos elementos podrán destacar los estrafalarios peinados que pueden incluir desde rayas de una pulgada dentro del cuero cabelludo, colitas al mejor estilo de Magnum, hasta las infaltables mechas color amarillo alcantarilla que tanto hacen resaltar al chirrete.

2 La Pinta

Pero no crea que con un corte de pelo es suficiente. Para ser el perfecto chirrete, usted debe hacer acopio de cualquier prenda que lo haga ver como si no tuviera ninguna clase de gusto para vestir. En primer lugar debe tener una gorra, de preferencia negra, con algún tipo de logotipo. No importa que logotipo sea, lo importante es que la gorra tenga alguna maricada.

Para la camiseta (las camisas están prohibidas), es necesario buscar una que esté lo más ancha y estirada posible. Si no la encuentra en ningún almacen, compre una cualquiera y déjesela a su mama como trapo de bajar ollas por dos semanas y para ese tiempo la tendrá lista. No olvidemos tampoco el pantalón, que debe tener la forma de un embudo, ancho en la parte de arriba, de tal modo que el fondillo llegue hasta las rodillas y angosto en la parte de abajo, de tal manera que afecte la circulación en los pies.

Los zapatos, al igual que la gorra, en ningún caso pueden ser de un sólo color, se sugiere que sean de al menos 3 colores, y que de esos al menos uno brille en la oscuridad, en el muy probable caso de que se vaya la luz en su sector.

3 La Dosis

Pero aún con el corte y la pinta, un chirrete no estaría completo sin una adicción a cualquier sustancia alucinógena ilegal. El chirrete de estrato alto se decantará por cosas como las pepas químicas, que le dejan un inconfundible aliento a tabla periódica, mientras que el de estrato medio se irá por cositas como el perico, el basuco o el famoso porro de marihuana. Y si es de estrato bajo, con el mismo bóxer que usa para echarse en el pelo bastará. Eso sí, la adicción tiene que ser letal para que pueda lucir como un zombie desnutrido y también para acabar con cualquier ingreso legal que por ahí le llegue y entonces tenga que acudir a…

4 El Crimen

Para ser el perfecto chirrete siempre debe tener disponible la droga a la que está adicto, y para eso no importa lo que tenga que hacer para conseguir el dinero. Los chirretes de estrato alto se decantarán por el viejo método de robarse las tarjetas de crédito de papi, meterle la mano en la cartera a mami y hasta al desprestigiado método de empeñar los aretes de oro de la abuela.

Y como en los estratos más bajos no hay ni tárjetas de crédito, ni cartera, ni mucho menos aretes de oro, les toca conseguirse un cuchillo, una navaja o hasta un alfiler y salir a conseguir la moneda de cambio más importante de nuestros días: el teléfono celular. Y como eso de salir a quitarle las cosas a la gente honrada, da como una mezcla entre vergüenza y miedo, es necesario que vaya completamente trabado, eso sí, corre el riesgo que de la traba que tiene vaya y termine matando a algún buen cristiano por el puto celular que se intenta robar.

5 La Música

Pero el último detalle y quizás el más importante, que complementa el corte, la pinta, la adicción y los atracos, es el gusto por la música. Para ser usted un perfecto chirrete debe ser aficionado número uno a la champeta, de preferencia la del Imperio o la del Rey de Rocha. Pero en caso de que su condición geográfica no le permita asistir a estos exquisitos eventos, siempre podrá declararse fan del reggaetonero del momento y tratar al máximo de emular su estilo, y su acento. Eso sí, sin importar el estrato, resulta 100% obligatorio que escuche dicha música a todo momento, con los audífonos más grandes que encuentre y que los lleve puestos hasta para ir al baño.

Resultados: Si usted tiene una o dos de las anteriores características mencionadas, no se preocupe, que nadie es perfecto y todos tenemos nuestros errores. Si tiene tres o cuatro, asústese, que está peligrosamente cerca de ver a un chirrete en el espejo y si tiene las cinco, pues nada, me avisa por donde va a estar atracando la próxima semana para no asomarme por allá ni en pintura.