Segundo episodio de la temporada y las fichas del juego final siguen moviéndose en el tablero de Westeros. Adiós Meereen. Adiós Braavos. Adiós Essos. Esta es la Era de Poniente. Veamos, cuáles fueron esos movimientos que se dieron en este capítulo.
En Oldtown
Sam sigue en su entrenamiento para convertirse en un Maestre para Jon Snow, quien ahora es el nuevo Rey en el Norte. Pero al parecer avanza a pasos agigantados. Para la muestra un Mormont.
Sam investiga sobre los procedimientos para curar la Escala Gris, ahora que Ser Jorah Mormont recibe su sentencia final por parte de La Citadel: como es un caballero le van a permitir quedarse un día más antes de pasarlo por una espada, en lugar de enviarlo a morir como zombie de piedra en las ruinas de Valyria.
Y luego de la investigación, el chico Tarly decide probar el polémico tratamiento con el Caballero Exiliado. Pero, bueno, Tarly no sólo parece experimentar, él parece estar 100% seguro que el tratamiento va a funcionar y teniendo en cuenta que el contrato de Iain Glen es hasta el último capítulo, podemos predecir que la tortura china que implica el tratamiento no lo va a matar. Creo.
En King’s Landing
Bueno y Cersei anda bastante actualizada en intrigas políticas, porque en busca de eliminar a Daenerys Targaryen de la ecuación lanza un discurso a los pocos lores de Westeros que se atreven a ir a La Fortaleza Roja. Discurso que incluye, al igual que los discursos de Juan Manuel Santos: medias verdades, verdades amañadas, mentiras y hasta post-verdad. Imagínate.
Cersei le dice a los lores que Daenerys va a lanzar un ataque con salvajes, eunucos y dragones que va a quemar a Westeros hasta reducirlo a cenizas. Que ella es peor que el Rey Loco, luego de su numerito en Meereen donde crucificó a los «nobles» (se le olvidó la palabra «esclavista») y que luego quemó la ciudad con sus «bestias».
Uno de los lores, Papá Tarly no está muy convencido, sin embargo parece que el discurso patriótico de Jaime, más que el de Cersei lo convence que, al menos por ahora, es mejor estar de lado de los Lannister. Y es que Cersei no se va a dejar quitar su puesto de reina tan fácil. Qyburn le fabrica una ballesta gigante cuyo propósito es matar dragones. Y la demostración con el cráneo de Valeryon, el dragón negro de Aegon Targaryen, funciona a la perfección.
En Riverlands
Bueno, y Arya llega a la taberna de Hotpie, donde este queda asombrado por el evidente cambio físico («eres muy bonita») y de actitud («¿qué te pasó, Arry?») de la chica Stark. Arya está decidida a ir a King’s Landing, pero llegan los rumores de que Daenerys piensa sitiar la ciudad. Sin embargo, los planes de Arya son puestos en pausa cuando Hotpie le comenta que los Bolton están muertos y que Jon es ahora el nuevo Rey en el Norte.
Arya al conocer la noticia cambia de inmediato y Hotpie le da una lección de amistad al no cobrarle el valor de los alimentos y la cerveza. Arya recupera la esperanza, misma que parece perder unos minutos después cuando le toca encarar a una manada de lobos mientras se dirige a Winterfell. Manada de lobos encabezada por su loba huargo, Nymeryia.
Esta escena es clave y está relacionada con lo que sucedió con Hotpie. Nymeria no ataca a Arya, pero en definitiva siente que algo ha cambiado irremediablemente en ella. No es la misma Arya de la primera temporada. Pero ¿por qué? ¿acaso es por el entrenamiento en Braavos? ¿o quizás por que se ha convertido en una asesina serial? En cualquier caso el punto es claro. Arya no es la misma.
En Dragonstone
Bueno, y Daenerys empezó a ponerle los puntos sobre las íes a sus aliados. ¿Primera parada? Varys. Daenerys le canta la tabla de una y le recuerda que Varys conspiró primero para tumbar al Rey Loco y luego a Robert y que así no le sirve a ella. Imagínate, un tipo que anda por ahí buscándole la caída a los reyes, o sea ¿qué presentación tiene eso? Pero Varys saca de la manga un truco fácil, el truco populista… y se gana a la Targaryen diciéndole que todo lo que ha hecho, lo ha hecho por el pueblo. Mejor dicho, Varys Maduro.
¿Segunda parada? Ellaria Sand, la nueva regente de Dorne. Quien al parecer está más interesada en reclamarle a Tyrion la muerte de Oberyn, que en organizar la caída de Cersei. Pero Daenerys sirve de referee y ambos nobles llegan a un acuerdo de respeto mutuo.
¿Tercera parada? La chica Greyjoy. Que también quiere invadir King’s Landing lo más pronto posible. Pero Daenerys, tomando el consejo de Tyrion decide que no va a mandarle dragones a Cersei para que quemen la ciudad. Ella no va a ser una reina de cenizas.
¿Cuarta y última parada? Olenna Tyrell. Y bueno Olenna le dice que en lugar de andar haciendo concesiones y andar pensando en las vidas ajenas, ella debe ser un dragón.
Pero el plan está hecho. Las fuerzas de Reach, Dorne y las Islas del Hierro sitiarán King’s Landing mientras que los inmaculados y los dothraki se encargaran de cortar el suministro de dinero proveniente de… ¡Casterly Rock!
Pero como si todo eso fuera poco, Melisandre se aparece en Dragonstone y le informa de una amenaza mucho más seria que requiere que ella se entreviste lo más pronto posible con Jon Snow, el nuevo Rey en el Norte. Tyrion respalda la idea.
Ah, y Gusano Gris le hace sexo oral a Missandei antes de irse al Oeste de Poniente. Nada más eso.
En Winterfell
Jon y Sansa reciben el cuervo de Dragonstone escrito por Tyrion. Hay dudas sobre si Jon debe ir a entrevistarse con Daenerys, pero cuando llega OTRO cuervo de La Citadel, con la información de Sam sobre las fuentes ilimitadas de Vidriodragón en Dragonstone la cosa cambia.
Jon se enfrenta al consejo de señores del Norte, que incluye a la perspicaz Lyanna Mormont. Nadie quiere que se vaya. El que no recuerda que Lord Rickard y Brandon Stark fueron masacrados por el Rey Loco, se acuerda de La Boda Roja. Pero Jon lanza su discurso. Como están las cosas, el día que el Rey Nocturno se le de por saltar La Muralla, los va a hacer papilla, y si quieren GANAR, en lugar de LUCHAR y mirar a ver si ganan, sería bueno tener tres dragones en la nómina. Así que el chico empaca con Davos, no sin antes de demostrarle a Littlefinger que él no es Eddard Stark y que va a ponerlo en su sitio cada vez que se aparezca.
En algún punto del mar estrecho
Y bueno, el plan A de Daenerys y Tyrion se va al carajo cuando Euron, uno de los aliados de Cersei, acaba literalmente con la flota de Yara. Las dos aburridas serpientes de arena que no son hijas de Ellaria son asesinadas. Yara, Ellaria y la hija de Ellaria son capturadas y Theon huye como cobarde. Pobrecito.
¿Qué pasará en el próximo capítulo? Teorías, insultos, comentarios, etc, son bienvenidos en la sección de comentarios.
En defensa de Theon cito a Bronn:
«Pero el sí»
es una cita rara pero nos recuerda que los heróicos honorables se mueren rápidamente.
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