Los ojos saltones y la actitud desgarbada y despreocupada de la Princesa Tiabeanie Mariabeanie De La Rochembaux Drunkowitz delatan el origen de Disenchantment (Título en español: (Des)encanto). Estamos ante la tercera serie de televisión creada por Matt Groening, luego de Los Simpsons y Futurama. Y la primera que no se transmite originalmente en FOX, sino en Netflix. Pero ¿Qué tal es esta serie animada? ¿Es tan buena como algunos dicen? ¿O es tan mala como muchos otros exclaman? A continuación, las respuestas.
Disenchantment cuenta la historia de la Princesa Tiabeanie de Dreamland, un reino fantástico situado en un universo de fantasía que rinde homenaje a muchas obras de fantasía medieval como Game of Thrones, el Señor de los Anillos, y a otro tipo de material, como el juego de Calabozos y Dragones y Warcraft. Pero obviamente no estamos allí para ver un homenaje, sino una parodia, pero dentro de un contexto bastante Groeningniano, si me permiten el uso de esa palabra.
Tiabeanie o como la conocen sus amigos «Bean» ve como su destino parece estar decidido cuando su padre decide unirla en matrimonio con un príncipe extranjero, hasta que un elfo rebelde llega por casualidad a la iglesia y evita el sacramento. Bean y Elfo pronto arman un equipo con Luci, un demonio personal enviado específicamente para tentar a la princesa, aunque realmente parece que es ella la que lo tienta a él. A medida que transcurren los capítulos, vemos como los 3 personajes unidos más por la casualidad que por la amistad, se enfrentan a villanos y situaciones adversas, que al final podrían llevarlos a su propia destrucción. Y no bromeo.
Primero que todo, considero absurdo comparar a Disenchantment con Los Simpsons y Futurama. Son tres series completamente diferentes, los Simpsons es una sit-com familiar animada, Futurama es una comedia sci-fi. Y Disenchantment es una comedia de fantasía ¿Cuál es la necesidad de mirar que tiene una que no tiene la otra?
Pero como las comparaciones son inevitables, pues toca recordarles que, por ejemplo, las dos primeras temporadas de los Simpsons también tuvieron SERIOS problemas para encontrar una narrativa estable. Futurama, evidentemente la halló mucho más rápido, pero su peso referencial geek la hizo difícil de digerir para todo público como Los Simpsons. Disenchantment corrige ambos errores. En primer lugar ya en el segundo capítulo los personajes están bien consolidados y generan toda la risa que el primero quedó debiendo. Y en segundo lugar, Groening aprendió que los chistes y situaciones deben ser familiares, si quiere la amplitud que tuvo con Los Simpsons, y los chistes son mucho más fáciles de entender y digerir.
La animación es de buena calidad. Hay buenos detalles y los personajes están bien construidos. Aunque sí, es cierto que les falta algo de personalidad, pero es que apenas van 10 capítulos y Los Simpsons ya pasaron el 600, si no estoy mal. Ninguna serie puede arrancar y establecer personajes icónicos en 10 capítulos y menos si son capítulos de media hora.
Y sí resulta muy interesante que Groening haya aceptado un arco argumental sobre toda la temporada, quizás sea una exigencia de Netflix, que tal vez coarta la posibilidad de tener capítulos individuales con su propio estilo como sus otras dos series, aunque David Lynch con Twin Peaks: El Regreso, demostró que sí es posible hacerlo. Quizás Matt Groening ya está en un nivel similar ¿o no?
En Resumen: Disenchantment es una serie que se ve y se disfruta mejor sin el peso de estarla comparando con Los Simpsons o Futurama; es una serie que aunque definitivamente es para adultos, los chicos también puede disfrutar con algo de discreción por parte de sus padres o adultos responsables. No se la pierdan, sobre todo para que luego ahorren espacio con los nuevos estrenos de Netflix.
4,58 / 5,00
★★★★★