Cronos, Mimic, El Espinazo del Diablo, Blade 2, Hellboy (1 y 2), El Labertinto del Fauno y Pacific Rim, esos son todos los largometrajes dirigidos por el director mexicano Guillermo del Toro y luego de dos horas y media viendo robots enfrentándose con monstruos al mejor estilo de los Power Rangers, toca decir que Pacific Rim es su peor película hasta ahora.

Pero ¡ojo! así como los feas de la televisión no son tan feas, así mismo una película mala de Guillermo del Toro, nunca será tan mala como esas basuras de «Silent Hill», «Actividad Paranormal» o «El Último Maestro del Aire». En realidad, bajo los estándares a los que nos tiene acostumbrados Hollywood, Pacific Rim o Titanes del Pacífico, como se le llamó en español, es una película, cuando menos entretenida y de buen nivel.
Para aquellos que ya se estaban echando ceniza en la cabeza creyendo que Pacific Rim no sería más que una copia en action-live de Neon Genesis Evangelion, doy un parte de tranquilidad. De hecho, apartando los monstruos y los robots… y los militares, y la gente con profundos traumas… y los clones… bueno apartando todo eso, diría que no hay muchas semejanzas. Pacific Rim se parece más a «Día de la Independencia» o a «Godzilla», que al famoso anime japonés que era más bien una exploración bastante crítica de la psique humana.
La película es entretenida, sí, y su historia está bien estructurada, tratando de balancear las escenas de acción, un poco de drama de niños traumatizados y hasta un poco de humor, como cualquier blockbuster del verano, pero no sobresale en ninguno de estos aspectos. Las actuaciones son pésimas, y los actores, ninguno genera ninguna empatía, tanto así que a media hora de acabarse la cinta, no recordaba el nombre del personaje principal. Los traumas de estos personajes están bien estipulados a nivel de guión y hubiesen funcionado con otros actores, pero con estos se le fue la paloma a Guillermo del Toro, o más bien a los ejecutivos de Warner.
Visualmente, pues como todas las películas de Del Toro, tiene su «tumbao» y todo, pero nada que no hayamos visto ya y creo que las películas de transformers a nivel visual son superiores. Es una película que te entretiene mientras estás sentado en la sala de cine, pero que no veo como opción para repetir y analizar. Sencillamente es entretenimiento puro que pierde el sabor minutos después de terminarla.
Y hablando del final, este es bastante predecible y no hay un twist extraño al final que valga la pena. Espero que Del Toro no nos salga con otro chorro de babas como este para su próxima película.
Calificación: 3.35/5.00