
¿Qué es la vida? ¿Qué es la muerte? ¿Qué pasa luego de la muerte? ¿Cuál es nuestro propósito en la vida? Tantas preguntas que nos hemos formulado desde que hemos tenido conciencia que nuestro tiempo en este planeta es limitado y buscando la remota esperanza que luego que dejemos de respirar exista algo más, algo más que putrefacción y destrucción, nos hemos aferrado a alguna de los cientos de miles de creencias que proliferan en el mundo.
¿Qué es el miedo a morir? ¿Es acaso el miedo a la muerte lo que sentimos o es más bien el miedo a dejar de vivir? Podrías imaginar que no hay cosa más aterradora que enfrentarse a la posibilidad de cesar de existir ¿Acaso la vida es tan bella, justa y armoniosa que nos destruye tan sólo la idea de que va a acabar? No debe ser eso ¿Es el dolor? Si, el dolor, todo lo relacionado con la vida y la muerte y el miedo a morir se resume en el miedo al dolor.
Sufrimos a diario, el dolor es parte de nuestra vida, físico o emocional ¿Qué pasa con la muerte? Sentimos miedo de morir porque la muerte es sinónimo de dolor, dolor en el que muere, dolor en los que lo rodean, dolor al ver que hubo tantas cosas que se dejaron de hacer por cobardía, por miedo, por las injusticias?

Aprender a vivir con el dolor, suena imposible, aprender a tolerarlo, aún más … Pero ¿Cuales son en realidad las opciones? Si hemos aprendido a vivir con dolor, en pequeñas dosis, en pequeñas cantidades ¿Es imposible tolerar lo peor? ¿Es imposible asimilar todo y seguir adelante? ¿Es posible escapar de los brazos de la muerte sólo asimilando el dolor? Y la pregunta más importante ¿Que tanto perdemos cuando aprendemos a superar el dolor?