Cuando películas como La Muñeca Vudú (Título original: The Devil’s Dolls) llegan a las salas de cines de Hispanoamérica, resulta muy difícil no preguntarse qué carajos es lo que piensan los distribuidores para traer semejante hueso a las carteleras. Es que luego de verla, sinceramente me quedan muchísimas dudas de que a Netflix, Amazon Prime o Hulu alguna vez se les vuelen las suficientes tuercas como para adquirir una película de estas para sus plataformas.
La Muñeca Vudú cuenta la historia de Matt (Christopher Wiehl) un agente de policía que luego de pasar años obsesionado con un depravado asesino en serie llamado Henry Bale logra ponerle fin a su carrera delictiva.
Lo irónico es que luego de sacar a Bale de circulación, Matt tiene que lidiar con una nueva serie de asesinatos cometidos en su ciudad, todo similares a los de Bale y peor aún, porque hasta su propia hija empieza a exhibir comportamientos asesinos.
Matt descubrirá que la causa de los nuevos asesinatos podría ser el misma Bale, pero a través de una conexión insospechada con unas muñecas halladas en una escena del crimen. De allí en adelante Matt comenzará una carrera contra el tiempo para identificar a los asesinos y salvar a su hija de la muerte.
A decir verdad, la película es en cierta medida entretenida y sobre todo eficiente, en el sentido de que no se desperdician minutos en diálogos estúpidos, y mucho menos en alegorías ridículas. Pero lo que la saca de cualquier posibilidad de considerarla «buena» son sus paupérrimos valores de producción.
La Muñeca Vudú parece una película hecha con el presupuesto mensual de un equipo comunal de microfútbol. Salvo algunas tomas sobre el área de Nueva Orleans, el resto de escenas son ciertamente pésimas. El director no tiene idea del buen manejo de la luz, de los planos amplios, del valor cromático, nada… Parece más bien una película filmada con un celular para subir por episodios en el difunto Vine, en la casa del dueño del celular.
La película, así mismo, no tiene una premisa clara y continúa vagando entre la posibilidad de proponer una moraleja sobre cómo es pésima idea guardarse los rencores y los odios, o sobre cómo es pésima idea tomar algo sin permiso. La primera premisa hubiese funcionado relativamente bien. La segunda no, y fue esa precisamente en la que más se enfocó la cinta.
Para resumir: La Muñeca Vudú es una película mala, malísima, pero dentro de esta dudosa calidad, deja ver una que otra luz de vez en cuando, luces opacadas por los pésimos valores de producción y dirección que hacen que en comparación con sus 85 minutos de duración, el póster se vea mucho más profesional. Una película que quizás en alguna plataforma basura como Crackle se vea bien, pero en la gran pantalla… no, no.
2,32 / 5,00
★★★★★
Un comentario en “Crítica X ^ La Muñeca Vudú”