A diferencia de los otros cientos de millones de lectores de la saga de Harry Potter, la verdad no estaba muy emocionado con el lanzamiento de Animales Fantásticos y Dónde Encontrarlos(Título original: Fantastic beasts and where to find them) y es que después de ser testigo de lo que le hicieron las tres películas de El Hobbit a la saga de El Señor de los Anillos, resulta bastante complicado creer en esos «reemprendimientos» cinematográficos. Y lo peor de todo es que los primeros sesenta minutos de la película me dieron toda la razón.
No deja de ser elocuente, que en sus 60 años de vida como escritor de ficción, haya sido precisamente en el otoño de su obra, que a nuestro Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, se le haya dado por escribir una historia situada en aquella ciudad testigo de sus primeros pinitos como escritor y periodista, la portuaria y recóndita ciudad de Barranquilla.
Debo decir que estoy bastante decepcionado de mi intento de instalar Ubuntu (un sistema operativo basado en Linux) en mi netbook. Ya había probado Ubuntu en mi PC de escritorio hace años y en realidad la más reciente versión me parece sencillamente genial, y decidí cambiar mi sistema operativo (Windows 7) a Ubuntu 11.04 en mi netbook, pero los resultados fueron cuando menos muy poco satisfactorios.
Primero, hay que descargar la imagen del archivo de instalación, es un archivo enorme y si no dispones de una conexión muy por encima de la velocidad promedio, te tardarás unas dos horas en terminar de bajarlo. Para instalar Ubuntu en el PC, debes quemar ese archivo en un CD en blanco, pero para netbooks que no disponen de una unidad de CD, la cosa no es tan sencilla, primero debes tener disponible una memoria USB, y lo mejor es que esté en blanco ya que en el proceso de convertir la memoria en una especia de «unidad de CD virtual» es posible que se pierda información que haya estado ahí.
Hay que descargar un programa para hacer que la USB se convierta en una imagen .iso. Bueno vamos mas o menos por la mitad. Luego se da click en el instalador que pide que reinicies el equipo, pero suele suceder muy pero muy a menudo que luego que se reinicia en el equipo no pasa nada, si, regresamos otra vez a windows lo más de normal. Entonces luego de una extensa consulta ya sea con Internet o con otro Ubuntero, te das cuenta que debes ir a la configuración inicial del equipo para que pueda leer la memoria USB y arrancar el sistema operativo desde allí, paso que tampoco goza de una agradable interfaz gráfica, sino que me recordó a aquellos oscuros tiempos de DOS.
Lo mejor es que ni siquiera debes elegir, puedes tener ambos.
Bueno, luego de esto, Ubuntu si arrancó desde la memoria USB, entonces viene el problema número uno, el sistema no reconoce las redes wifi inmediatamente, y lo curioso es que hay que desacargar una serie de drivers…¡Desde Internet! entonces hay que tener internet primero para agregar las características wifi y poder tener internet portatil… una enorme paradoja.
Bueno supongamos que llegamos a instalar los drivers y el wifi funciona a la perfección, nos damos cuenta entonces que hay que descargar muchas más cosas, empezando por los drivers codecs para escuchar música o ver vídeos, que por lo general vienen preinstalados en cualquier versión de windows, pirata o legal.
Me consta que Ubuntu es un sistema realmente poderoso y práctico, pero realmente no veo posibilidades de enorme masificación en los usuarios que como yo, no se siente satisfechos con windows, pero que necesitamos para las cuestiones básicas sin tanto enredo y tanto complique y tanta vuelta.
No me imagino a un novato con su primer netbook siquiera intentar cambiar la configuración inicial del pc, para que arranque Ubuntu desde la memoria USB, sin que se muera de terror viendo la pantalla azul, creyendo que ya dañó el computador.
Entonces, hay nos quedamos con dos opciones, o nos quedamos con windows con sus miles y miles de virus y peligros, o nos vamos a amargar la vida con Ubuntu que para netbooks no parece funcionar tan bien como lo hace en PC, o si sólo disponemos de redes wifi y no de redes físicas…bueno hay un punto intermedio, si tiene espacio, instale ambos sistemas operativos en su netbook, así cuando se aburra de maldecir a windows, puede pasarse a Ubuntu, y cuando Ubuntu le saque canas verdes, se pasa a Windows y fin de la discusión.
ACTUALIZACIÓN 16.07.2011 8:00 PM
Aunque a mi en realidad me importa un comino que me llamen de cualquier manera, lo único que no me deja de sorprender es que una comunidad que se autodenomine tan buena, tan colaborativa y todo eso, tenga miembros que no ahorraron en insultos y groserías, si esa es la comunidad de Ubuntu, realmente ha perdido todo mi respeto y honestamente prefiero quedarme con Windows o esperar el sistema operativo de Google, que ojalá llegue lo más pronto posible.
ACTUALIZACIÓN 17.07.2011 11:40 PM
Bueno luego de esta muy mala experiencia por demás, no sólo no voy a intentar instalar de nuevo Ubuntu en mi netbook sino que lo voy a remover de mi PC, los comentarios que muestro abajo son sólo una muestra de los que me enviaron, hubo unos mucho peores, y realmente no me interesa en lo absoluto pertenecer a una comunidad que en lugar de instruir a sus nuevos usuarios se alza como una horda enardecida, y cuando me pregunten sobre Ubuntu diré exactamente lo que me han dicho aquí. Por algo dicen que lo barato sale caro.
Habiendo ido tantas veces a Tolú y Coveñas, resulta desafiante tratar de escribir algo que condense lo vivido en esos sitios, pero puedo empezar en orden cronológico inverso.
Parque en Tolú.
Teniendo en cuenta que en Semana Santa , demasiada gente quiere ir a pasar bueno en las playas del golfo de Morrosquillo, debe tenerse en cuenta que el transporte puede estar complicado para estas fechas del año, y tambien en vaciones de mitad de año, en Diciembre, la semana de receso escolar en Octubre, bueno, en fin, por ejemplo para conseguir un cupo en uno de los buses de tranporte público en estas fechas toca avisparse y correr apenas se vea aparecer en el horizonte el antigo bus que este en turno, y si usted es mujer mejor digale a un hombre que se monte primero y le aparte el cupo o puede terminar aplastada en mitad de la puerta de acceso.
Tolú es un destino sencillo, no hay un arquitectura ultramoderna, como en El Rodadero o Bocagrande, es un pueblo sencillo y tiene construcciones pintorescas, la gente acude a sus playas por el fácil acceso a servicios de comidas, y rumba, a diferencia de Coveñas donde es mucho más dificil, además de costoso. Sin embargo las playas de Tolú, aunque son atractivas y el municipio ha hecho un esfuerzo por mantenerla en el mejor estado posible sobre todo para fechas de vacaciones, no son tan apetecidas como las de Coveñas.
Pero antes de desplazarnos a Coveñas, recuerde darse un paseo por el camellón de Tolú, darse un paseo por el pueblo y mirar sus arquitectura y por supuesto dar un paseo en las famosas «bicitaxis», es un excelente destino para turistas con recursos limitados.
A unos 40 minutos de Tolú está Coveñas, Coveñas es en esencia diferente a Tolú, es más una sucesión lineal de cabañas de descanso y negocios, que un pueblo en el sentido estricto de la palabra, por eso además de la diversión diurna que ofrece la playa, en las horas de la noche muchos deciden ir a Tolú, donde la oferta en rumba es un poco más variada. Cerca de Coveñas está un brazo de mar conocido como Cienaga de la Caimanera, que es un lugar a visitar cuando se decida a conocer el golfo de Morrosquillo.
Por último un paseo por los kilometros de playas de Coveñas pueden ser sumamente satisfactorios, especialmente en compañía, ver en el horizonte la amplitud del Golfo de Morrosquillo, y ver en un costado como se pone el sol en medio de la tarde. Aunque ya hayamos ido y venido tantas veces de Tolú y Coveñas, siempre habrá algo interesante que hacer en esas hermosas playas, eso si tenga cuidado a la hora de gastar y/o de contratar servicios, l@s comerciantes de la zona son expertos en «darle por la cabeza» a los turistas inexpertos. Solo sobra decir que hay que ir y conocer los encantos de estos hermosos lugares dentro de nuestro departamento.