Año: 2019 | Duración: 2 horas y 2 minutos | País de origen: Estados Unidos.
Dirigida por Todd Phillips, cuyos créditos más resaltables se centraban en la trilogía de ¿Qué pasó ayer? / Hangover, y protagonizada por el muchas veces nominado, pero nunca ganador del Premio de la Academia, Joaquin Phoenix, Joker es el primer paso de Warner Bros y de su rama cinematográfica de DC Cómics, en llevar a sus personajes a un nivel completamente diferente al que nos ha acostumbrado Marvel, y su contraparte, también propiedad de Warner, el DCEU.
Ahora, estando en un medio inundado de personajes de cómics, relacionados con superhéroes, ¿realmente vale la pena ver otro enfoque de estas historias? ¿ya no fue suficiente con el el Universo de Marvel de Disney, el de Fox y el de Sony, y encima el Universo de DC, para sacar otra iteración de este mismo? Pues, a continuación, la respuesta.
¿Qué harías si la sociedad esperara que te comportes de una manera en la que sencillamente por tu condición mental, por tus hormonas o por tu crianza, no puedes hacerlo? ¿Qué sucede cuando la sociedad te acorrala precisamente porque no puede entender ese aspecto que te hace diferente? Esas son las preguntas sobre las que el director Todd Phillips, reconocido por la trilogía de ¿Qué pasó ayer?, basó la trama de Joker, película que incluso antes de su lanzamiento ya había generado controversia y mojado frecuentemente las redes sociales, tanto por marcar un punto aparte para las películas asociadas a los personajes de cómics, como por su particular perspectiva sobre la violencia.
Ahora, si usted después de ver la cinta ha quedado con alguna pregunta, duda o interrogante, ha llegado al lugar indicado porque a continuación damos inicio al Análisis y Explicación de … Joker.
Incluso desde antes de su estreno, Joker había llamado la atención de cierto grupillo de personas por el asunto de que «es peligroso glorificar las debilidades de un hombre blanco que se convierte en un criminal». Aquí sí voy a ser completamente honesto y sin ningún tipo de tapujos: todo el mundo tiene derecho a tener su opinión, pero una opinión que considere que Joker es una película que incita a la violencia es una opinión basada en unos supuestos de mierda construidos por algunos para quedar como héroes de lo correcto sin hacer absolutamente nada.
Al contrario, lo que muestra Joker es precisamente las consecuencias que trae una sociedad orientada a la violencia como método de resolución de problemas e injusticias, que justifica el odio de clases y que se deja masificar por falsos ídolos viralizados por el poder de los medios y las redes sociales.
Joker no es la primera, ni sera la última que utiliza un personaje espeluznante para tocar puntos álgidos de nuestra construcción como sociedad. Hannibal Lecter es utilizado para reducir al ser humano como parte del menú, en una sociedad de consumo. Y su aparición en pantalla no convirtió a nadie en canibal.
Scarface trata de mostrar las consecuencias de introducirse en el mundo de los negocios ilegales, de surgir de la nada a la cima en un mundo en el que el atractivo del vicio es descomunal, y nadie por eso se ha sentido particularmente tentado a salir a la calle a comercializar drogas ilegales.
Y la influencia más importante de Joker, Taxi Driver, que es incluso reforzada por la presencia de Robert De Niro en pantalla, habla sobre la necesidad de tomar en mano propia la justicia, y no por eso alguien salió a las calles a destruir mafias de trata de blancas.
Cada una de estas películas, así como otras de Quentin Tarantino, no pretenden convertir a nadie en algo que no son, ni estimularlas a hacer algo que no quieren, sencillamente muestran las diferentes causas y consecuencias que tienen esos comportamientos y nos invitan a reflexionar qué podemos hacer para nunca caer en ellos.
Joker es una perfectamente calibrada película que nos invita a pensar no una, sino dos y tres veces antes de usar la violencia, porque quizás en el proceso de querer acabar con un mal serio, terminemos por crear algo mucho, muchísimo peor.
¿Cómo se transformó un tipo con una seria condición mental, sin ningún tipo de talento reconocible, en un símbolo de la insatisfacción representada en su expresión más violenta? Precisamente esa es la pregunta que genera todo el hilo conductor de Joker, y la línea de tiempo que lo explica es francamente aterradora.
Arthur Fleck, ya sea que se confirme que es hijo biológico de Penny Fleck y de Thomas Wayne o no, inició su vida bajo abuso físico y probablemente también emocional por parte de uno de los novios de su madre, al punto que afectó irreversiblemente su capacidad cerebral. Lo que siguió a partir de allí, no es mucho mejor.
Penny, como lo confirman en Arkham, fui recluida allí sin tener ningún tipo de acceso a Arthur, por lo que se puede deducir que el joven pasó ese tiempo en algún tipo de orfanato o en algún hogar de paso, donde las condiciones ciertamente no pudieron ser mejores.
En algún momento, Penny salió de Arkham y Arthur tuvo que hacerse cargo de ella. Arthur tiene serios problemas para socializar debido a su condición que involucra afectación pseudobulbar y esquizofrenia paranoide, con síntomas asociados a la psicosis y la apatía. Sin embargo, así tuvo que salir a las calles y enfrentarse con su realidad, debía buscar empleo.
En algún momento en que Arthur empezó a salir al mundo, su condición le hizo imposible hacer una vida, de lo que llamamos normal, y es muy probable que haya mostrado algún tipo de conducta violenta, ya que fue recluido en un hospital psiquiátrico, donde además lo diagnosticaron y le mandaron un tratamiento.
Sin embargo en todo este tiempo, el afán de Arthur por amoldarse a las normas de la sociedad, lo llevó a un estado de insatisfacción permanente donde en ningún momento sintió algún tipo de felicidad, controlando sus propios impulsos.
Así que cuando inicia la película y esa misma sociedad en la que él trata desesperadamente de encajar, lo mira como un fenómeno al que hay que pisotear, maltratar y hasta destruir, por el pecado de ser diferente, el límite que Arthur se había puesto sencillamente desaparece y es ahí cuando ocurre el asesinato en el metro. Es entonces cuando Arthur percibe por primera vez algo que le da felicidad y es el de destruir a personas que en algún momento intentaron dañarlo, al punto de literalmente bailar de alegría.
Sin embargo, luego de esto, Arthur aún se sentía cohibido a darle rienda suelta a sus impulsos, pero cuando por primera vez, observa que la gente parece validar sus actos, termina por convertirlo en un asesino sin ningún tipo de ataduras o frenos, o como él lo dice en la película «ya está harto de pretender que no es divertido matar». Se termina por convencer que está haciendo justo lo que debe hacer, es allí cuando corta con sus vínculos afectivos reales e imaginarios, con su madre Penny Fleck, y con su ídolo Murray Franklin, asesinándolos a ambos.
Este último acto, con Franklin lo convierte en un fenómeno de masas, en el símbolo, en el hombre que pudo defenderse de una sociedad tóxica que sólo quiere verlos destruidos. Ese reconocimiento le asegura lealtades dispuestas a todo y así es como finalmente ese ser patético que es al inicio de la película, se convierte en un villano temible y peligroso. Lo convierte en el Guasón.
Finalmente, es una sociedad tóxica que valida la violencia como método de lucha, la que es finalmente responsable de crear un monstruo como El Guasón.
A pesar de estar situada temporalmente en 1981, Joker incluye en su narrativa una situación bastante moderna, y es lo referente a la injusticia social como catalizador de violencia a escala masiva.
Al inicio de la película, la situación empieza con algo bastante puntual que es la huelga de las basuras. Se puede inferir que la huelga inició por lo mismo que inician las huelgas: insatisfacción salarial orquestada por un sindicato que quiere más beneficios.
Aquí, la falta de acción de los gobernantes locales, en medio de un escenario electoral, hace que la crisis se vuelva crónica, la basura empieza a pudrirse en las calles, generando vectores peligrosos para la salud humana. La gente, con razón está insatisfecha, ya que sumado a eso, o quizá como consecuencia de eso, la economía de la ciudad está colapsando. No hay empleo, los negocios cierran, y al no poder recaudar dinero suficiente en impuesto, se cierran empleos en el sector público. Mientras el desempleo se dispara, la tensión aumenta.
Es allí donde los asesinatos de los chicos ricos en el metro terminan de agravar la situación. La gente considera que el payaso hizo algo que todo el mundo esperaba que sucediera, que alguien por fin tomara en sus manos la injusticia en la ciudad y le diera cierto balance, la gente sin duda alguna empezó a sentir que SÍ se podía hacer algo, al superar ese límite invisible.
La gente de Gótica se empezó a organizar en protestas, que finalmente cuando Arthur reveló en directo que él era el asesino y mató a Murray Franklin en televisión, estallaron por completo. La gente decidió tomar acción por su propia cuenta, sin entender que en el proceso habría gente que moriría en los disturbios y que la ciudad como tal entraría en una nueva etapa de decadencia de la que no saldría en décadas.